Recuerdo cuando era pequeña , de unos 10 o 12 años, que por navidad lo que más esperábamos con ansias era la apertura de la botella de Ponche de Huevo! Creo que era la única licencia alcohólica que nos permitían en casa. Aunque en las comidas de nuestra tía abuela nos dejaban beber vino tinto rebajado con soda 🙁
Cuento esto por que años después me encuentro con que a Er Esposo el licor de huevo o Eierlikör le encanta. Como comprenderán en Mallorca no es fácil encontrarlo, solo en los supermercados alemanes y ocasionalmente en algún supermercado de franquicia alemana, y en época navideña.
Así que cuando Er Esposo sentado en su butaca un miércoles cualquiera de febrero me dice: como me tomaría ahora un buen chupito de Eirlikör…. Yo no puedo hacer otra cosa que asaltar la despensa, y ponerme manos a la obra para traeros una excelente receta de Licor de Huevo.
Ingredientes
9 yemas de huevo
250 ml de leche condensada
300 ml de vodka, uno de buena calidad.
Preparación:
Con estos tres ingredientes tan sencillos me diréis que esto es pan comido, pero cuidado que la cocción puede ser fundamental para el éxito o el fracaso. Y es que acá todo tiene que ver con cuidar que el huevo no se cocine.
Lo primero que haremos es colocar una olla con dos litros de agua a hervir, con ella haremos un baño de maría. Si no conoces este método de cocción es hora de que te presente a: María La Profetisa, la primera mujer alquimista en la historia, que con su método de cocción revolucionó la época, ya que implicaba un modo indirecto de exposición al calor, con un líquido que mantenía siempre la misma temperatura al hervir (100° centígrados)
Foto: Wikipedia
Mientras el agua llega a la temperatura necesaria tendremos tiempo de limpiar las yemas y mezclarlas bien.
En otra olla que no sea más pequeña que la que tienes para el baño de María, y fuera del fuego, coloca la leche condensada y el vodka, mézclalos muy bien. Ahora de una en una vas a ir separando las yemas de las claras. Tomate tu tiempo para hacerlo bien. Limpia todo lo que puedas las yemas, quítale todo tipo de partículas, suciedades o ese punto blanco que a veces traen (disco germinal) con esto evitarás que alguna parte se cocine y quede dura dentro del ponche.
Ve añadiendo a la mezcla de vodka y leche condensada cada yema de huevo, una por una y mezcla todo lo que puedas, solo cuando la tengas bien mezclada puedes incorporar la siguiente.
Al terminar de mezclar todas las yemas, el agua del baño de maría ya debe estar a punto de hervor. Coloca entonces la olla o recipiente con la mezcla en la olla con el agua caliente. Recuerda que el agua caliente nunca debe tocar el recipiente de la mezcla.
Y comienza a mezclar con un batidor o una cuchara de madera, como si no hubiese un mañana. Nunca dejes de remover la mezcla, así evitarás que se cocine solo una parte de ella. Transcurridos unos 5 minutos de hervor, apaga el fuego y continua revolviendo hasta que veas que la mezcla comienza a espesarse.
Sabrás que está lista cuando la mezcla nape la cuchara, es decir cuando la sumergir una cuchara en la mezcla, sacarla y pasarle el dedo de arriba a abajo la mezcla no regrese a cubrir la cuchara, si no que se queda como un camino limpio sin la mezcla.
Foto: cookimia.com
Deja enfriar la mezcla fuera del fuego, preferiblemente ya colocada en la botella en la que la servirás. Cuando esté fría podrás comprobar si necesitas un poco más licor o no. Si te ha quedado muy espesa y no quieres añadir más vodka puedes aligerarla con un poco más de leche condensada.
Tschüssi!!